Tu vista y tu sonrisa son tesoros que merecen el mejor cuidado, pero la sanidad pública no siempre cubre todas tus necesidades. Por eso, pensar en contratar un seguro de salud dental y oftalmológico es una decisión inteligente. Te voy a explicar qué suelen incluir y cómo elegir la mejor protección. ¡Cuidar de tu visión y tu salud bucal es fundamental!
¿Por qué un seguro específico para tu salud dental y oftalmológica?
La salud bucodental y la salud visual son dos pilares de tu calidad de vida. Sin embargo, muchos tratamientos importantes (empastes, ortodoncias, revisiones de la vista…) no están cubiertos por la Seguridad Social o tienen largas listas de espera.
La gran ventaja de un seguro dental y oftalmológico es que te da acceso rápido y asequible a especialistas. Te permite realizarte tratamientos preventivos y correctivos con costes muy reducidos o, en muchos casos, de forma gratuita. Es una forma de cuidar tu salud y, a la vez, tu bolsillo.
Seguro dental: ¿qué coberturas son las más importantes?
Un buen seguro dental debe ofrecerte una combinación de servicios gratuitos y tratamientos con precios especiales (franquiciados). En mi opinión, estas son las coberturas que no deberían faltar, ya que son la base de una buena protección:
- Odontología preventiva: esto es lo esencial. Incluye revisiones anuales, limpiezas bucales, radiografías simples y fluorizaciones. La mayoría de seguros lo ofrecen sin coste.
- Obturaciones (empastes): es uno de los tratamientos más comunes. Un buen seguro suele cubrir los empastes simples o aplicarles un precio franquiciado muy ventajoso.
- Extracciones: las extracciones simples también suelen estar incluidas o tener un coste muy reducido.
- Tratamientos complejos con descuentos: para tratamientos más caros como endodoncias, periodoncias, ortodoncias o implantes, el seguro no los suele cubrir al 100%, pero sí te ofrece descuentos muy significativos sobre el precio de mercado, lo que supone un gran ahorro.
Seguro oftalmológico: ¿qué debe cubrir para cuidar tu visión?
La vista es uno de nuestros sentidos más preciados. Un seguro oftalmológico te ayuda a mantenerla en las mejores condiciones. La cobertura principal y más importante es el acceso a revisiones oftalmológicas completas sin largas esperas. Esto es clave para detectar a tiempo problemas como miopía, astigmatismo, glaucoma o cataratas.
Además, un buen seguro debe incluir pruebas diagnósticas específicas (como campimetrías o tomografías ópticas) cuando sean necesarias y cubrir las consultas de urgencias oftalmológicas.
Mi consejo como experto
Algunas pólizas de salud completas ofrecen descuentos o ayudas para la compra de gafas o lentillas, aunque no suelen cubrir el coste total. Fíjate bien si tu seguro lo incluye, porque si usas gafas, es una ventaja que puedes aprovechar cada vez que cambies de graduación.
¿Van juntos los seguros dentales y oftalmológicos o se contratan por separado?
Aquí tienes varias opciones, y la mejor dependerá de lo que ya tengas y lo que necesites:
- Seguro de salud completo: algunas pólizas de salud de gama alta ya incluyen la cobertura dental básica y la oftalmológica como parte del seguro. Es la opción más cómoda.
- Seguro de salud + complemento dental: es la fórmula más habitual. Contratas un seguro médico y le añades el «módulo» o «complemento» dental por una pequeña cantidad extra al mes.
- Seguro dental independiente: si ya tienes un seguro médico que no incluye lo dental, o si solo te interesa proteger tu boca, puedes contratar una póliza exclusivamente dental. Son muy económicas.
Los seguros exclusivamente oftalmológicos son menos comunes; esta cobertura suele venir integrada en los seguros de salud generales.
¿Buscas la mejor protección para tu vista y sonrisa?
Los seguros dentales son de las pólizas más rentables del mercado, ya que no son caros y con que los utilices un par de veces al año para una limpieza y una revisión, ya los habrás amortizado. Si quieres encontrar la mejor opción para ti, llámanos y te ayudaremos a comparar sin compromiso.
Preguntas Frecuentes
Al igual que con la ortodoncia, la cirugía refractiva (para corregir miopía, hipermetropía o astigmatismo) no suele estar cubierta al 100%. Sin embargo, la mayoría de aseguradoras tienen acuerdos con clínicas oftalmológicas de prestigio para ofrecer a sus asegurados precios especiales y descuentos significativos en esta operación.
No, por regla general ningún seguro dental cubre el coste total de tratamientos tan complejos y caros como la ortodoncia (ni para niños ni para adultos) o los implantes. Lo que sí ofrecen son descuentos muy importantes sobre la tarifa privada (pueden llegar al 30%-40%), lo que supone un ahorro de cientos de euros en ocasiones.
