Vivir con una enfermedad crónica como diabetes, asma o hipertensión requiere cuidados constantes. Y surge la duda: ¿cómo me puede ayudar un seguro de salud con una enfermedad crónica? En este artículo te voy a explicar cómo abordan las aseguradoras estas situaciones y qué coberturas son clave para que encuentres la mejor protección para tu día a día.
¿Cómo trata un seguro de salud una enfermedad crónica preexistente?
Una enfermedad crónica es una patología de larga duración, como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares o el asma, que requiere un seguimiento médico continuo. Para una aseguradora, si esta enfermedad ya estaba diagnosticada antes de contratar la póliza, se considera una preexistencia.
Este es el punto clave, ya que las compañías evalúan las preexistencias para decidir si te aceptan y bajo qué condiciones. Por eso, aunque pueda parecer complicado, tener una enfermedad crónica no significa que no puedas contratar un seguro de salud. Lo que sí significa es que debes ser totalmente transparente en el cuestionario de salud y entender cómo te va a cubrir la póliza.
Mi consejo como experto
Aunque tu enfermedad crónica quede excluida, un seguro de salud sigue siendo muy útil. Te cubrirá cualquier otra dolencia no relacionada (una gripe, una lesión, una consulta al dermatólogo) y te dará acceso rápido a especialistas y pruebas para otras cuestiones.
Coberturas y beneficios de un seguro para pacientes crónicos
Aunque la enfermedad en sí misma pueda tener limitaciones, un seguro de salud te ofrece beneficios muy valiosos para gestionar mejor tu condición y tu salud general:
- Acceso rápido a especialistas: este es uno de los grandes beneficios de un seguro de salud. Si eres un paciente crónico, necesitarás revisiones periódicas con endocrinos, cardiólogos, neumólogos, etc. Un seguro privado te permite acceder a ellos sin largas listas de espera.
- Segunda opinión médica: ante un diagnóstico o un cambio en tu tratamiento, poder contrastar la información con otro especialista de prestigio te da una gran tranquilidad y seguridad.
- Programas de prevención y bienestar: algunas aseguradoras ofrecen programas específicos para pacientes crónicos, como planes de nutrición, fisioterapia o seguimiento personalizado, que son muy interesantes.
¿Buscas el mejor seguro para tu caso?
Si tienes una enfermedad crónica y no sabes qué seguro te conviene más, es normal. La situación es compleja. Llámanos y te ayudaremos a analizar tu caso, buscando las compañías y pólizas que mejor se adapten a lo que necesitas. Sin compromiso.
Limitaciones de los seguros de salud para enfermedades crónicas
Es vital que conozcas las limitaciones para no llevarte sorpresas. La mayoría de los seguros de salud privados no están diseñados para cubrir todos los gastos de una enfermedad crónica preexistente. Estas son las restricciones más habituales:
- Exclusión de la patología crónica: es la limitación más común. La aseguradora te cubre para todo excepto para los gastos derivados de la enfermedad que ya tenías.
- Aplicación de sobreprimas: si la compañía decide cubrir tu enfermedad crónica, lo más probable es que te aplique una sobreprima, es decir, un aumento en la cuota mensual para compensar el mayor riesgo.
- La medicación no está cubierta: este es un punto muy importante. Los seguros privados no cubren el coste de la medicación que compras en la farmacia, solo la que se administra durante una hospitalización. Si tomas un tratamiento diario, su coste seguirá corriendo de tu cuenta.
Preguntas frecuentes sobre seguros y enfermedades crónicas
¿Me pueden rechazar por tener una enfermedad crónica?
▲Sí. Las aseguradoras tienen derecho a evaluar el riesgo y, si consideran que es muy alto debido a la gravedad o el estado de tu enfermedad crónica, pueden rechazar la solicitud de seguro. Sin embargo, lo que una compañía rechaza, otra podría aceptarlo con condiciones, por eso es clave comparar.
¿Qué enfermedades crónicas suelen ser siempre excluidas?
▼Aunque depende de cada compañía, hay un consenso general en no aceptar como nuevos clientes a personas con ciertas patologías de alto coste o riesgo, como trasplantes previos, VIH, algunas enfermedades degenerativas en estado avanzado, cirrosis o cánceres activos o recientes.
¿Es mejor un seguro de reembolso si tengo una enfermedad crónica?
▼Puede ser una buena opción. Un seguro de reembolso te da total libertad para elegir al especialista que tú quieras, aunque no esté en el cuadro médico. Si te aceptan la enfermedad crónica (aunque sea con sobreprima), podrías acudir a los médicos de referencia en tu patología y recuperar un alto porcentaje de la factura (80%-90% normalmente).